Mestres Cabanes, Josep Mestres Cabanes, Fundació Josep Mestres Cabanes

La obra mural de Mestres Cabanes para el Liceo es su producción civil más conocida, si bien, además de las colaboraciones liceísticas, durante estos años llevó a cabo varios proyectos para las iglesias de Santa Maria de Montcada y de los Redentoristas, para particulares, etc. Otras intervenciones de un ámbito más privado y con temas profanos fueron diversas colaboraciones de los años sesenta, aunque durante esta década se centró especialmente en los murales de temática religiosa.

Hacia el inicio y la mitad del siglo XX, Barcelona era una ciudad extraordinariamente wagneriana. Mestres Cabanes, a quien el carácter romántico de las obras de Wagner había cautivado completamente, recibió durante esta época encargos de diversos particulares, wagnerianos acérrimos, para decorar las paredes de sus casas. Así es como pudo volcar toda su sensibilidad romántica y desarrollar al máximo el detallismo que siempre le caracterizó. También sintió la necesidad de plasmar en su pintura el tema religioso, y en este campo destacan los retablos de la Seu de Manresa y las pinturas murales de las iglesias de los Redentoristas de la calle Balmes de Barcelona, de Santa Maria de Montcada y de Puigcerdà. Mestres Cabanes también dedicó una parte importante de su tiempo a restaurar obras ya existentes, especialmente en el Gran Teatro del Liceo. Son muy destacables la reparación del techo del Salón de descanso y las alegorías de las óperas alemana (Valquiria), italiana (Otelo) y francesa (Manon), pintadas por Lorenzale en 1908 en la embocadura del proscenio.

No podemos olvidarnos tampoco del arco de la embocadura del proscenio del Teatro Cervantes de Buenos Aires, donde reprodujo alegorías de la Castilla de Cervantes, de forma totalmente figurativa, con adornos del más puro estilo tradicional, ni del boceto para el techo del Teatro Real de Madrid.
 

Pintura del salón wagneriano de la Casa Tarrés (1949-1950). Respresenta una escena de Wotan y la Valquiria, acto I.
Colección Argentaria, Madrid.


Decoración de una capilla de la iglesia de los Redentoristas, de la calle Balmes de Barcelona (1954): Sant Jordi i el drac.

© Fundació Josep Mestres Cabanes